WASHINGTON
El Papa Francisco bendijo a América
POR: ALIRIO ALEMÁN
La gira papal a América inició desde Cuba y luego a los Estados Unidos de América donde un encuentro programado en la Casa Blanca llenó de esperanzas a un pueblo necesitado.
“No sirve de mucho la riqueza en los bolsillos cuando hay pobreza en el corazón” ha dicho el Papa Francisco y en esta visita a esta gran Nación aprovechó para aseverar que la humanidad padece de muchos males y se viven tristes momentos.
Los jardines de la Casa Blanca estaban a lleno total y pantallas gigantes transmitían el mensaje papal que traía alegría y esperanza. Aquí parte del discurso:
“Como hijo de una familia inmigrante me alegra estar en este país que ha sido construido en gran parte por tales familias. En estos días de encuentro y diálogo me gustaría escuchar y compartir muchas de las esperanzas y sueños del pueblo norteamericano”
El Papa Francisco habló de la familia como base fundamental de la historia, también pidió que salvaguarden los derechos de las personas y las comunidades y se rechace la discriminación en todas sus manifestaciones (étnicas, religiosas y sociales) e hizo un llamado especial a los obispos en EEUU a estar atentos como buenos ciudadanos a preservar y defender esa libertad.
El Santo Pontífice y Obispo de Roma se ha caracterizado por su sencillez y férreo defensor de la humanidad y se dirige a los líderes mundiales con esa misma autoridad que Dios le ha encomendado.
“Señor Presidente, me complace que usted haya propuesto una iniciativa para reducir la contaminación atmosférica y no es justo que este problema se lo dejemos a las futuras generaciones…trabajemos juntos y arreglemos nuestra casa en común” le dijo al mandatario.
Se dirigió al presidente Obama y agradeció por reparar relaciones rotas (Cuba) y abrir nuevas puertas a la cooperación dentro de nuestra familia que conlleve a la reconciliación, la justicia y la libertad, pidió también a los hombres y mujeres de buena voluntad de EEUU a apoyar iniciativas de la comunidades internacional para proteger a los más vulnerables del mundo (Refugiados) y que gocen de la voluntad de la paz y la prosperidad que Dios quiere para todos sus hijos.
Los aplausos de miles de asistentes interrumpían su discurso y terminó pidiendo más compromisos por un mundo mejor.
!Que Dios bendiga a América! Fueron las frases finales del Papa Francisco en su visita a la Casa Blanca.
CALLES Y AVENIDAS ABARROTADAS
La avenida Constitución y calles aledañas estaban abarrotadas de asistentes que esperó por muchas horas el recorrido en su papamóvil y los aplausos, suspiros se vivían con entusiasmo y plegarias en ver a un santo hombre a unos cuantos metros de distancia.
SOPHIE CRUZ CON MENSAJE MIGRATORIO
También hubo esas sorpresas cuando Sophie Cruz, la niña heroína de 5 años de edad nacida en este país burló la barrera de seguridad y conmovió al mundo al entregar una carta al Papa francisco donde pide interceda por su familia y millones de inmigrantes en la Unión Americana.
Sophie Cruz vestida con su huipil (vestido) de mil colores y dos trenzas que recogían su cabello negro denotaba su origen oaxaqueño mejicano y se convierte en la protagonista de la lucha por la aprobación de una Reforma Migratoria para más de 11 millones de indocumentados.
“Quiero contarte que mi corazón está triste por el odio y la discriminación hacia los inmigrantes de este país. Te pido que hables con el presidente Barack Obama y con los congresistas para que APRUEBEN LA REFORMA MIGRATORIA para los inmigrantes”, se podía leer en la carta escrita a mano que le escribió Sophie al máximo representante de la Iglesia Católica.
“Tengo miedo de que se lleven a mi familia”. “Ellos son buenas personas. Saben trabajar en los campos cultivando naranjas, sandías, cebollas y muchos vegetales. Por lo tanto merecen salir de la oscuridad”, escribió la niña que viajó con su padre y los miembros de una organización de inmigrantes a la capital de EE.UU. para ver al papa Francisco.
Posteriormente, en entrevista con la agencia AP, la menor confesó que teme cada día que deporten a sus padres. “Tengo miedo de que el ICE se lleve a mi familia”, afirmó la niña en referencia a la agencia fronteriza estadounidense.
“Creo que tengo derecho a vivir con mis padres, a ser feliz. Mi padre trabaja muy duro todos los días en una fábrica de metal. Todos los inmigrantes como mi padre se merecen vivir con dignidad, con respeto y se merecen una reforma migratoria”, sostuvo la niña en la entrevista.
Por su parte, el padre de Sophie, Raul, que lleva diez años viviendo en EE.UU., calificó la jornada de este miércoles de extraordinaria: “Fue un milagro que el Papa mirara a mi niña y que la eligiera para darle su bendición”, dijo.
Pero Sophie no fue la única niña hispana que recibió la bendición papal. En otro momento de su viaje en el papamovil, el pontífice tomó en brazos a un niño de cinco meses, hijo de inmigrantes salvadoreños, y le dio un beso en la cabeza.
Además, el Papa hizo referencia a la inmigración en su visita a la Casa Blanca y recordó que él mismo es hijo de una familia italiana inmigrante en Argentina. “Estoy feliz de ser un invitado en este país, que fue en gran parte construido por familias parecidas”, sostuvo.
