EL EVANGELIO EN MARCHA
¿Cómo vencer las trampas de Satanás? (1)
Por: Pastor Kléber Jiménez
“ …para que Satanás no gane ventaja alguna sobre nosotros;
pues no ignoramos sus maquinaciones. ” 2 Corintios 2:11
Ya hemos visto anteriormente las razones por las que Satanás nos odia. No es que nosotros le hayamos hecho algo malo a él; sino que simplemente porque nosotros los seres humanos somos el clímax de la creación de Dios y somos el producto del amor de Dios.
Recordemos que antes de nuestra creación como seres humanos, Satanás había sido creado como el sello de la perfección, lleno de sabiduría, y acabado en hermosura; fue un querubín grande, es decir, los ángeles más cercanos al trono de Dios que los otros ángeles; fue creado perfecto; hasta que se halló maldad en el: Ezequiel 28:12-19.
Por su maldad, fue arrojado del cielo como un rayo: Lucas 10:18. Él está sentenciado al lago de azufre y fuego por la eternidad; sentencia que muy pronto se va a ejecutar. Sabiendo el que su condena está determinada, no desea ir solo a esa condenación eterna, sino que desea llevarse consigo a ese castigo eterno a todos los seres humanos posibles que fuimos creados a la imagen y semejanza de Dios.
Para ello, Satanás tiene una trampa para todos los seres humanos y tres trampas más para los hijos de Dios.
- SATANÁS CIEGA EL ENTENDIMIENTO A LAS PERSONAS PARA QUE LA LUZ DE CRISTO NO LE RESPLANDEZCA Y NO VENGAN A SALVACIÓN, E IMPIDEN QUE SE CONVIERTAN EN HIJOS DE DIOS: JUAN 1:12; 2 CORINTIOS 4:4.
Desde el Edén, esta ha sido su primera trampa a todos los seres humanos. Satanás ha cegado la mente y el corazón de los seres humanos con filosofías, religiones, placeres mundanos, vicios, adicciones, materialismo; humanismo, etcétera, etcétera. Recordemos que la Biblia declara que toda persona que cometa un pecado, se convierte en esclavo de la persona que le hace pecar, en este caso; como Satanás es el que peca y hace pecar desde el principio; y porque todos los seres humanos hemos cometido pecado; por lo tanto; nos hemos convertido en sus esclavos: Juan 8:44-47; Romanos 3:23.
Al pecar, estamos presos en la cárcel de Satanás y el no abre las puertas de la cárcel a nadie; es decir, que por ninguna fuerza humana, el ser humanos puede escapar de la cárcel de Satanás: Isaías 14:17.
Satanás ha inventado la creencia de la “Evolución”, la cual afirma que el ser humano es producto de un accidente cósmico; y por lo tanto no hay Dios; entonces no hay a quien rendir cuentas; y que podemos hacer lo que nos plazca, con tal que a nosotros nos guste o que nos sintamos bien al hacer tal o cual cosa.
Satanás engaña a las personas, haciéndoles creer que cualquier religión es buena, con tal que la practique bien. El engaña a las personas, haciéndoles creer que Dios es amor y que por lo tanto “todos” seremos salvos; porque Él es amor. Es verdad que Dios es amor; pero también es un Dios justo; y dice que no tendrá por inocente al culpable de pecado: Nahúm 1:3.
Se puede decir, que más del 90% de la población mundial está atrapada en esta primera trampa: Juan 3:36; 1 Juan 5:19.
Pero aquí está la buena noticia; usted puede ser libre de la cárcel de Satanás, cuando usted se rinde a los pies de Cristo Jesús. La Biblia dice: “Y conoceréis la Verdad, y la Verdad te hará libre” Juan 8:32. “Si el Hijo te libertara, serás verdaderamente libre” Juan 8:36. Solamente Jesucristo, quien es la Verdad: Juan 14:6; le dará libertad de las cadenas de Satanás.
Eso consiste en reconocer que es pecador; debe arrepentirse de corazón de todos los pecados cometidos, es decir, arrepentimiento es dolerle en su corazón todo lo malo que haya hecho; después debe aceptar a Cristo Jesús como el único Salvador de su vida; reconociendo que SOLAMENTE Cristo Jesús, fue el que murió, fue sepultado y resucitó después de tres días, para darle a usted y a todos los que le aceptan, el perdón de pecado y vida eterna.
Al hacer esa confesión de todo corazón; usted empieza una vida, una relación de amor con Dios, a través de Cristo Jesús en el poder del Espíritu Santo; quien viene a vivir en usted desde el momento que acepta a Cristo. No cambia de religión; porque ninguna religión lo salva. Usted cambia de estilo de vida. Ahora tiene una relación de amor con Dios, que durará por toda la eternidad.
- SATANÁS NO QUIERE QUE SE CONVIERTA EN DISCÍPULO, DESEA QUE SEA BEBÉ ESPIRITUAL, DESEA QUE SEA CARNAL: MATEO 28:19; EFESIOS 4:14.
No crea que porque usted ya aceptó a Cristo Jesús, Satanás ya no le molestará o tratará de destruir. Si usted perteneciera a una ganga o pandilla, y después de cierto tiempo, usted decide salirse de la pandilla; ¿Usted cree que los miembros de la pandilla le harán una fiesta de despedida? No. Al contrario, a lo mejor lo maten.
Si los seres humanos actúan de esa manera, Satanás es peor; él está furioso con todas aquellas personas que han sido libertadas de su cárcel por Cristo Jesús. Y el, va a impedir que usted cumpla con la orden dada por nuestro Señor de ir y hacer discípulos a todas las naciones. El impedirá que usted se convierta en un discípulo; recuerde que Jesús nos llamó a ser discípulos y no meros creyentes.
Un discípulo es aquel que pasa mucho tiempo con su maestro; que lee, estudia, memoriza y practica las enseñanzas de su maestro.
Por ejemplo; nuestros niños en las escuelas, pasan aproximadamente ocho horas diarias con sus maestros, y además; invierten tiempo en casa con las tareas que les mandan los maestros; es decir, que ellos invierten un promedio de más de 40 horas semanales: eso es ser discípulo.
Si se hace una pregunta en toda congregación cristiana de ¿Cuántos se han leído la Biblia entera? En muchas ocasiones que hemos realizado esa pregunta en diferentes iglesias; lamentablemente no más del 10% de la congregación se ha leído toda la Biblia.
CONTINÚA LA PROXIMA SEMANA…
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